lunes, 6 de agosto de 2012

Partidas analizadas (I)

Comenzamos la serie con una partida del flamante MF Juan Manuel Gaitán, disputada por el comentarista en la última ronda del Abierto Internacional de Mar del Plata.

Hacé click aquí, para verla en el visor.


 Gaitan,Juan Manuel (2249) - Perelman,Hernan (2374) [A59]
Abierto de Mar del Plata Marcel Duchamp (9.12), 07.04.2012
[JuanMa Gaitán]

1.d4 Cf6 2.c4 c5 3.d5 b5 4.cxb5 a6 5.bxa6 g6 6.Cc3 Axa6 7.e4 Axf1 8.Rxf1 d6 9.h3 Ag7 10.Cge2 0-0 11.Rg1 Da5 12.Rh2 Cbd7 13.Dc2 Tfb8 14.Tf1 Cb6 15.Tb1 Ca4 16.Ad2



16...Cd7 [16...Cxc3 17.Cxc3 Cd7 18.Rg1 como habían jugado Shulman-Khalifman en su segunda partida.] 17.b3 Cxc3 18.Cxc3 Da3 19.Rg1 [Si 19.Ac1 Db4 20.Ad2 (20.Ab2 c4 y queda mejor el negro) 20...Dd4 y aunque parece que las blancas tienen problemas en expulsar la dama negra, mirando con más detenimiento, la ubicación de esta pieza ocasiona más problemas a las negras, por lo cual creo que tengo ventaja.] 19...Tb7 20.Ca4 Tab8 21.Tfc1 h6?! Un debilitamiento innecesario, dado que Ag5 no era una amenaza. [21...c4 22.Dxc4 Dxa2 23.Ag5+/=] 22.Ac3 Axc3 23.Cxc3


La posición de las blancas es mejor; las negras parece que no han actuado con la energía necesaria para evitar que las blancas mejoren sus piezas y puedan imponer su ventaja material. 23...Tb4 24.Cd1


Aquí ofrezco tablas, porque entablando esta partida ganaba la categoría. Si bien desde el punto de vista del resultado, la decisión es inobjetable, en algún sentido esto no está bien, dado que uno tiene que ambicionar ganarle a los mejores. Pero esta falta de espíritu de lucha fue algo que me acompañó a lo largo de este torneo cuando tuve que enfrentar a jugadores de mayor elo. 24...Cf6 25.f3 Ta8 26.Tb2 Tab8 27.Tcb1 Cd7 28.Ce3 Cb6?? La obvia amenaza ...Ca4 es fácil de refutar y deja a las negras mal paradas con una simple maniobra. 29.Dc1!


29...Da6 [29...Ca4 30.Cc2; 29...Da7 era mejor, por los menos especula con el avance ...c5-c4 y luego alguna movida del Cb6.] 30.Cc2 Tb5 31.a4 Ta5 32.Dxh6 Tc8 33.h4 Cd7 34.h5 gxh5?? 35.Ce3


La amenaza Cf5 le sale muy caro a las negras. [35.Ce3 e6 36.dxe6 fxe6 37.Dxe6+ Rf8 38.Cf5+-] 1-0

lunes, 16 de julio de 2012

Táctica de entrecasa: Las continuaciones.

Alvarez,E - Sanseverino,V. LDU (t1) 2012

Para ver la continuación, hacé click aquí


Fell,S - Ferro,E. Mayor FASGBA (tt) 2012

Para ver la continuación, hacé click aquí

jueves, 12 de julio de 2012

Táctica de entrecasa

Te ofrecemos dos posiciones interesantes para analizar de partidas jugadas en la zona:

Juegan las negras. Cómo hacen las negras para frenar la amenaza Dg7?
De la partida Alvarez-Sanseverino, LDU (torneo 1)/ UNLa. 2012

Juegan las negras. De la partida Fell-Ferro, Mayor por equipos FASGBA 2012.
En breve, te ofrecemos las continuaciones.

jueves, 28 de junio de 2012

FINALES DE ALFIL Y CABALLO (1)




Los principios que rigen los finales con estas piezas se basan en reglas propias, que pasaremos a describir, así como en los principios generales para todos los finales. En general, el alfil es una pieza más fuerte que el caballo, que puede imponer con más facilidad la ventaja material, mientras que si existe una igualdad material el bando que tiene el alfil tiene una pequeña ventaja, aunque es muy importante la conformación de los peones, dado que cuando todos o la mayor parte de los peones se encuentra ubicados en casillas del mismo color que el alfil, el caballo es preferible. Si existe un peón de más, esta es una ventaja suficiente para ganar: la idea general es forzar la coronación o por el avance de los peones para aumentar la ventaja material. Con dos peones o más de ventaja, el problema es menor, dado que sólo depende de la manera en la que se avanzan los peones. El proceso ganador en los casos de finales de alfil y caballo con peón de más puede ser dividido en cinco partes: 1)Colocar todas las piezas en la posición más ventajosa, 2)Debilitar los peones adversarios lo más que sea posible, 3)Crear un peón pasado lateral, 4)Si una pieza es desviada para detener el peón, capturarla, 5)Si el rey es empleado para bloquear el peón, maniobrar con nuestro rey hacia el otro flanco y establecer allí una superioridad decisiva. En muchos casos, una o más maniobras de las antes descriptas, resulta superflua, aunque es necesario tener esto bien en claro, en especial con las diferentes combinaciones. En el caso de disponer de un peón de más, si el bando con ventaja material dispone de un caballo, es preferible generar la amenaza de tener un peón pasado lateral y no crearlo rápidamente, dado que el alfil puede sostener un flanco y al peón pasado. Si el peón pasado es creado en el centro, esta situación es más fácilmente aprovechable si el bando de la ventaja dispone de un caballo y no de un alfil, esto se debe al hecho de que se requiere de una considerable cantidad de maniobras hábiles para forzar la entrada del rey, o la conquista de una ventaja material adecuada. En conjunción con un caballo, un peón central pasado, resulta más fuerte que con un alfil, principalmente a causa de que la función del peón pasado en reducir la movilidad del rey enemigo y forzar la entrada del propio. La superioridad del alfil sobre el caballo se sostiene en varios elementos: el alcance, la facilidad de desplazamientos, la posibilidad de retirarse de una casilla y seguir ejerciendo presión sobre el mismo punto, son algunos de ellos. Tal como dijo Filidor, los peones son el alma del ajedrez y la presencia de ellos en casillas de uno u otro color determina la fuerza de una u otra pieza. Uno de los factores que ayuda a que la ventaja se incline del lado del alfil, es el hecho de que esta pieza, por sí sola puede dejar sin jugadas al caballo, como se observa en el diagrama siguiente; este elemento puede ser suficiente para ganar una partida por sí solo, o para dejar al bando que dispone del caballo, con la obligación de resignar una posición defensiva y así permitir, por ej. el ingreso a un final ventajoso. 

Yussupov-Ulhmann 1997

55.Ad5+- El primer ejemplo de copamiento del caballo por parte del alfil. Dado que las negras no pueden ir al cambio de piezas porque pierden fácilmente el final de peones, las blancas utilizan este recurso para forzar a las negras a caer en el zugzwang y así obtener nuevas ventajas. 55...Rd7 [ El final de peones tras 55...Cc6 es perdedor: 56.Axc6 Rxc6 57.Rc4 h5 58.a4+-] 56.Re4 Re7 57.Rf5 h5 58.h4(.) c4 [ Falla: 58...Re8 por: 59.Rf6 c4 60.e6 c3 61.e7+- A las negras le falta una pieza.] 59.Re4 Cb3 60.Axc4 Cd2+ 61.Rd5 Cf3 [ Después de : 61...Cb1 62.Ad3+- y con el mismo recurso usado anteriormente, las blancas anulan al caballo.] 62.Ad3!! [ Las negras pierden luego de 62... Cxh4 63.Ae4+- y el caballo queda encerrado otra vez. ] 1-0

sábado, 23 de junio de 2012

El ajedrez según Mihai Suba



Parte 1:

 Aprender y olvidar

Empezaré parafraseando la pregunta de introducción al libro "Problemas de la Filosofía" del gran científico, y bien aficionado al ajedrez, Bertrand Russell.
¿Hay algún conocimiento de ajedrez que sea tan cierto que ningún jugador razonable pueda dudar?
Esa cuestión es de las mas difíciles que se pueden preguntar. Contestar, pero no de manera descuidada y dogmática, como en la vida ordinaria, o incluso en la mayoría de los libros, es tarea difícil. La respuesta tiene que ser critica, .después de explorar todo el enredo que nos provoca, y después de darnos cuenta de la vaguedad y confusión que subrayan nuestras ideas ordinarias sobre el tablero.
En el juego o enseñanza de cada día suponemos de demasiadas cosas que, al escrutinio más cercano, conllevan tantas contradicciones que solo un esfuerzo mental serio nos permite saber que es lo que podemos opinar. Cuando se trata de lo que transmitimos a otros, es preciso más cuidado y responsabilidad todavía.
Incluso la experiencia personal, que sin duda debería servirnos para derivar algún conocimiento, es muy posible que nos sirva cosas desde subjetivas hasta erróneas. Preguntar por ejemplo a Kasparov sobre la India de Rey, que tantos éxitos le proporcionó , y os dirá la maravillosa que es esta defensa, cuando en realidad, el motivo de su éxito con la India de Rey está en una preparación casi exhaustiva, en su mejor entender de las posiciones resultantes y en su mayor habilidad táctica. En su carrera Garry abordó muchas aperturas y variantes de dudosa construcción estratégica, les sacó todo el zumo, luego, cuando la gente se había enterado de cómo combatirlas, las abandonó. Detrás suya hay cohortes de jugadores defraudados que se preguntan porque pierden cuando juegan «como Kasparov».
Dependiendo de la edad a la que aprendemos el ajedrez, de nuestra pasión, más o menos sin limites, para el juego y sobre todo del entorno ajedrecístico donde damos los primeros y los siguientes pasos hacía el
dominio del juego, en nuestros ojos se filtran muchos instantáneos de posiciones. A nuestros oídos llegan muchas palabras de ajedrez, consideraciones y sentencias que pasan al nivel del involuntario y luego influyen nuestra reacción en el tablero, es decir nuestra manifestación inintencional.
Ya habéis acertado a que me refiero - a lo que algunos llaman intuición ajedrecística, otros llaman talento, otros llaman reflejo, etc. En una palabra es erudición pasada al subconsciente. Escuchad que dicen Alejandro Beliavsky y Adrián Mikhalchishin en el libro "Los secretos de la intuición ajedrecística": «La intuición es central en todas las decisiones que tomamos en ajedrez; entender su papel vital es imprescindible para mejorar el juego. Los jugadores que intentan calcularlo todo están condenados a perder contra aquellos que utilizan armónicamente sus habilidades lógicas y su intuición.» La intención de los autores es de ofrecer prototipos de posiciones donde tenemos que contar más con la intuición y otros donde hay que ser más analítico.
Me parece que se oyen protestas, ¿Qué? ¿Usted no está convencido que la mayoría de las cosas que hacemos en el tablero y en la vida son inintencionales? ¿Usted qué piensa cuando va en bicicleta? Usted no piensa nada, solo está pedaleando. Si intenta escuchar mis consejos sobre como pedalear, girarlo frenar, mientras pedalea, usted puede acabar cayéndose con la bicicleta. En una serie anglo-americana para niños, el detective Freddie estaba consultado por un "ciempiés por haber perdido la sincronización de sus no se cuantos pies. La respuesta fue «ni mirarlos ni pensar en ello» es decir dejar la sabiduría natural del cuerpo que se encargue de ello. Otro ejemplo de proceso que nos pasa cada día y no es un producto de la voluntad es el sueño. ¿O es que usted no duerme? No, no aquí. Ya lo se que lo mejor que se puede hacer durante una conferencia es dormirse. Sólo «el enemigo de clase no duerme», según Lenin. Total que muchas cosas están dentro de nosotros y no las podemos controlar bien. ¡Ojala! podíamos rebobinar toda la información acumulada por .el subconsciente y hacer las correcciones oportunas. El conocimiento que llamamos del tipo «procedimental» como, por ejemplo, el necesario para dar mate con dos torres, con entrega de alfil en «h7», ir en bicicleta, conducir un coche o nadar parece que está allí en lo suyo. No vamos a insistir porque los procedimientos se comprueban fácilmente si funcionan bien o no.
Pero hay otro tipo de conocimiento, el «declarativo», que además de ser mucho más frecuente y menos comprobable, se pega también en el subconsciente. Aquí está el problema. ¿Como se llama usted? Aunque soyGM, no podía calcular su nombre. Me lo tiene que decir usted. Puede que es una información falsa si yo entendí mal o usted me mintió, pero yo no tengo más remedio que creérmelo. Esta información pasará a mi subconsciente, asociada con su aspecto. Si le veo jugando, puedo añadir más a esta información incierta, por ejemplo: «x» es un buen jugador. O no, según me parece. Este juicio, a base de poca prueba, añadiría a mi conocimiento más incertitudumbre todavía.
Vamos a bajar ahora desde los cielos de la filosofía a lo más terrestre, práctico e inmediato que nos interesa, al lenguaje ajedrecístico de cada día. Este es él que nos está proporcionando los milpiés de nuestra sabiduría ajedrecística y de nuestros desencantos. Al analizar un lenguaje evitando contradicciones, nos tenemos que situar fuera de él según demostró el mismo Bertrand Russel. Suponemos que la siguiente discusión transcurre en un «meta-lenguaje ajedrecístico». Nada más bajar de los cíelos hay que subir otra vez. En ese «meta-lenguaje» el sentido de cada palabra o expresión se parece al lenguaje ajedrecístico ordinario, pero no tanto.
A ver las reglas que aprenden los novatos en ajedrez sobre el manejo de la apertura:
Salir siempre con el peón rey o dama.
¡Me parece bien aunque yo no lo hago „
Colocar las piezas para que actúen hacía el centro.
¡Estupendo!.
Sacar los caballos antes que los alfiles.
¡Hmmm!
Enrocar cuanto antes. ¿Hmmm?
Luego se sigue con algo peor, un adoctrinamiento del tipo «NENE CACA»:
NO mover una pieza más de una vez. (¿Qué tal la Española, o peor todavía la Defensa Alekhine?)
NO mover más de uno o dos peones. (Y contra India de Rey ¿qué?)
NO perder el tiempo con ataques sin fondo, tipo «mate pastor». (Entonces la jugada de Botvinnik en una variante de la Inglesa - Ataque Panov es errónea.)
NO dejar casillas débiles que el otro puede dominar u ocupar con sus piezas. (¿Sveshnikov?)
NO cambiar un alfil! por un caballo (Nimzoindia),
NO crearse debilidades que puedan servir de marco de ataque. Ésa última a lo mejor quiere decir que no movamos ningún peón.
¿Es jugar al ajedrez muy distinto de lo de ir en bicicleta? Si ralentizas y tomas tu tiempo para «pensar en ello» ¿acabarás jugando mejor o cayéndote con la bicicleta?
Vamos a ver como jugamos al ajedrez, al menos así lo veo yo y muchos más.
Introspección: Inspiro y expiro. Pongo en marcha el hipnótico péndulo con un movimiento firme. Dejo las volutas de círculos concéntricos de mi concentración a apaciguarse en mi mente. Absorbo la posición y la
posición me absorbe a mi. Me gasto una broma interiormente para arrancar mi adrenalina ajedrecística y para desarmar al oponente. Estoy mirando el tablero y veo la posición en cuanto mejor me permite mi imaginación visual. La «inintencionalidad» toma el mando mientras yo estoy marcando la posición. Para marcar la posición estoy empleando todo lo que puedo ver y todo el ajedrez que conozco. Hago notas mentales o me acuerdo otras notas mentales hechas con anterioridad. Durante la partida, mi mente esta en dos modalidades mayores, llamémoslas«reaccionando» y «oteando». Si estoy en forma, mi temporizáción es correcta. Si mi temporización es correcta, el ritmo de «oteando, reaccionando, oteando, reaccionando y oteando» encajan perfectamente en las ranuras de las dichas volutas de círculos concéntricos de mi concentración. Entonces me encuentro en la "zona ajedrez". "Zon ajedrez" es un estado «inintencional» de atención y energía enfocados de tal forma para aumentar el rendimiento ajedrecístico. Es un estado óptimo para discurrir ajedrez. En la «zona ajedrez» todas las funciones no esenciales de mi cuerpo se apagan. Pierdo la cuenta sobre la mayoría de las variables de entorno. Mi mente ejerce ciertas cosas cuando está reaccionando» y otras parecidas pero distintas cuando está «oteando».
En la modalidad «de reacción» estoy absorbiendo la posición del tablero, estoy calculando variantes, estoy evaluando posiciones, estoy tomando y recordando mis notas mentales y solo la «inintencionalidad» decide
cuando hacer que y hasta que punto. Estoy en la modalidad «de reacción» más bien cuando me toca jugar.
En la modalidad «de otear» me estoy situando en la atalaya del juego, estoy fantaseando sobre futuras posiciones o fases de la partida, percibo cosas que no había visto o no me había acordado en la modalidad anterior , repaso a vista de pájaro algunos cálculos y evaluaciones de unas posiciones que todavía no están en el tablero pero situadas en mi tercer ojo, junto a las notas mentales. Estoy en la modalidad «de otear» más bien cuando le toca jugar a mi oponente.
¿Saben donde quiero llegar? A que los dogmas y las reglas de la doctrina «NENE CACA» solo se pueden contemplar en la modalidad «de otear».
En la modalidad «de reacción» solo se puede jugar con la posición y contra la última jugada del contrincante. Nada de prejuicios. Solo hay que encontrar una jugada correcta. O puede que haya combinaciones.
Aquí está una larga lista de los prejuicios que nos pueden obturar la vista:
• El valor relativo de las piezas 1, 3, 3, 5, 9 puntos introduce un criterio materialista cuya opacidad no nos deja ver combinaciones brillantes. Hay que matizar que es un valor ORIENTATIVO y que puede cambiarse mucho según la configuración. Acordar que el objetivo del juego es hacer jaque mate, no amontonar material de ventaja. Hay que describir la ventaja mínima de final para poder ganar (una torre o alfil + caballo) y también dar ejemplos de celadas típicas donde la caza de material lleva al cazador hacia el desastre.
• La ventaja de la pareja de alfiles. Hay que matizar que se trata de posiciones abiertas y, al ser posible, con estructuras de peones asimétricas.
• La ventaja del alfil contra caballo en final. Hay que dar ejemplos y contraejemplos (estructuras con muchos peones y bloqueo, con . peones doblados o con huecos) donde el caballo supera claramente al alfil. También hay que matizar que el alfil conjuga mejor con la torre y el caballo con la dama.
• La ventaja de la mayoría en el ala de dama. Es un error decir esto.
Decir la ventaja de la calidad es algo correcto, aunque en muchas posiciones no se confirma que una torre sea superior o ni siquiera igual a un caballo o un alfil. Es una verdad estadística. Lo de la mayoría es una mentira estadística. Es una mentira incluso para muchos finales.
Esta en conflicto directo con algunos principios estratégicos (menos islas de peones, ataque de la menoría, etc.) En el medio juego una mayoría central es mucho más importante (Alekhine) y hasta en varios finales. En las aperturas semi-abiertas modernas el negro persigue la estructura 4-2 contra 3-3. (Francesa, Caro-Kann, Siciliana Alapin, Dragón e incluso líneas de la Najdorf o Scheveningen. Esto se corresponde al principio de Nimzovich: «Una mayoría es en tanto más valiosa en cuanto tiene más peones.» En la Grünfeld incluso se entrega un peón para conseguir una potente , -mayoría central (la variante Tb1). Estoy harto de ver la partida, Marshall - Capablanca que sale en todos los manuales junto con la lamentable defensa de Marshall. (La 23a partida del match, Nueva York 1909). La mayoría en el ala de dama puede constituir una ventaja solo en finales muy sencillos (como los de peones). Creo que lo correcto sería decir «La ventaja de la mayoría central» y matizar los ejemplos que se dan de costumbre como excepciones.
Consejos, contra el dogmatismo - como reemplazar, borrar, olvidar, atenuar ciertos conocimientos incompletos o erróneos del subconsciente Pocas soluciones se pueden dar para esto. Ya hemos dicho que no se puede rebobinar el pasado para borrar la información mala. El tiempo y la experiencia la atenuarán. Mirar posiciones, problemas y combinaciones y preguntarse porque hay dificultad en solucionarlos.
Concienciando un problema ayuda mucho en solucionarla. Por ejemplo, mucho antes de ser un jugador conocido, yo jugaba partidas amistosas en un parque. Siempre me quedaba mal con las negras en una cierta
variante de «Los dos caballos». Lo que me acordaba perfectamente era que jugaba una línea teórica. Al mirar el libro se aclaro todo, era una línea teórica mala. Es un ejemplo de información incompleta. Entendí el peligro de aprender cosas por encima. Repetí muchas veces haciendo la jugada buena: «Ésta es la línea buena, la otra es mala». Jamás volví a jugar dicha línea. Sin embargo algunos rasgos de lo que ingerimos alguna vez se quedaran para siempre. Saber aprender es imprescindible. Sobre esto hay un montón de información. Saber olvidar, igual que en la vida, es un gran misterio.
Ejemplos:



Qué rasgos (sea calidades o defectos humanos) son característicos o incluso típicos a los jugadores de ajedrez y en que proporción, según el nivel de juego.
Aquí está el resultado de una encuesta realizada a más de 1.500 jugadores, de los cuales unos 80 tienen el ELO mayor de 2400.
A la pregunta «¿Es inteligente?» (las respuestas son en tanto por ciento)
• sub. 1600: 52 - 27/ (muy inteligente)
• 1600-1900: 60 – 27
• 1900-2100: 59 – 29
• 2100-2400: 55 – 35
• más de 2400: 51 – 35
¿Puede aprender cosas nuevas fácilmente, si quiere?
• 86
• 89
• 87
• 89
• 94
Ser mente abierta es bastante, muy importante:
• 32-55
• 33-56
• 35-53
• 29-63
• 41-45
Memoria regular, buena
• 49-42
• 46-44
• 43-51
• 33-61
• 40-56
Si es importante estudiar estrategia (poco, importante, muy importante)
• 31, 38, 24
• más de 2400 16, 35, 48
Conclusiones: Ampliar la memoria Aprender al nivel subconsciente. Mantener una mente abierta.
¿Hace caso a las partidas perdidas para mejorar?
• 72-84
Voluntad de ganar (importante, muy importante)
• 38-17
• 35-44
Concentración (importante, muy importante)
• 65-23
• 47-42
¿Que persigue? (algún golpe táctico, ventajas posiciónales, solo jugar la posición)
• sub: 42,40,18
• más: 26,35,39
Conclusiones: Flexibilidad, saber cuando hacer las cosas. El ajedrez es un problema de temporizáción. (Fischer).
La elasticidad es una de las cualidades mas importantes para un jugador de ajedrez. (Alekhine)
En el primer lugar viene la comprensión posicíonal
En el segundo - el reconocimiento de modelos (entender patrones, cosas típicas no modelos de pasarela).La táctica viene en el tercer lugar.
Estudiar finales (muy importante)
• 31-50%
Si te gusta una jugada, puede ser por (intuición, cálculo minucioso, reconocimiento de modelos)
• 39, 47
• 35, 25
• 26, 28
¿Si encontrar la mejor jugada es muy importante?
• 33, 26
¿Es fuerte?
• 22-63
¿Si la energía es muy importante?
• 30-65
Tener ídolos es importante:
18, 28, 30, 26, 22
Espero que los resultados de esa encuesta sirvan criterios para enseñar según el nivel de los cursantes. Sobre los criterios de edad os diré más o menos lo que recomienda la pedagogía moderna española. Hay que tener en cuenta que los buenos en ajedrez son más prodigios que el nivel general, con ellos podemos bajar en un año o dos el tipo de enseñanza.
6-8 años aceptan conocimientos empíricos pueden aprender modelos y procedimientos que no sean muy complejos. Su memoria es una esponja. Enseñar aperturas simples, finales y combinaciones.
Evitar dogmas y principios estratégicos que no tengan base concreta (como la regla del cuadro o la cuenta de las islas de peones).
9-11 años aceptan principios lógicos y conocimientos abstractos. Se tiene que insistir en el planteo, la conexión entre apertura y medio juego, el paso al final. Se pueden utilizar las dogmas como base de referencia y con las menciones que hice. Se insistirá en el desarrollo harmónico, la concentración sobre el centro, el ataque de la menoría, etc. Se puede empezar una clasificación de las combinaciones (por tema, motivo, etc.)
12-14 años se desarrolla el sentido de competición que se puede utilizar como motivación para un estudio serio. Se insistirá en la preparación de la partida, la técnica de la realización de una ventaja y otras cosas que convergen en conseguir la victoria. Se puede profundizar en la estrategia, en como abordar varias situaciones que pueden ocurrir, como el ataque o la defensa, tanto técnicamente como psicológicamente.

Fuente:http://www.laplaza.org.ar/